Otra a la RAE.

Como todos sabéis, yo soy "supernormal"; y a las 2.30 de la madrugada de una noche de miércoles no se me ocurre otra cosa mejor que hacer que proponer una enmienda a un artículo del DRAE (lo que viene siendo una definición de una palabra del diccionario). Os adjunto a continuación el texto íntegro del correo que acabo de enviar a estos señores que rigen la "política lingüística" del castellano.

Buenas noches,

Aunque talvez debiera escribir "Buenos días" o "Buenas tardes", teniendo en cuenta a la hora que usted estará leyendo esta misiva.

El motivo, quizás denodado, de mi e-mail no es otro que hacerles una propuesta de enmienda a uno de los artículos del Dicccionario de la Real Academia Española. Les explico a continuación cuál es mi propuesta, y las razones en las que la baso.

Me parece curioso que se acepten vulgarismos tales como murciégalo, toballa o asín, siendo eso, vulgarismos, en el DRAE, y que, sin embargo, no se adapten a la legislación actual que rige nuestro país, y el término matrimonio se siga considerando en el mismo como "Unión de hombre y mujer concertada mediante determinados ritos o formalidades legales.", cuando hace ya 5 años que entró en vigor la Ley 13/2005 que modifica el Código Civil en lo concerniente al derecho a contraer matrimonio. En particular, esta reforma añade un segundo párrafo al vigente artículo 44 del Código civil, manteniendo el primer párrafo intacto:

«El hombre y la mujer tienen derecho a contraer matrimonio conforme a las disposiciones de este Código.
El matrimonio tendrá los mismos requisitos y efectos cuando ambos contrayentes sean del mismo o de diferente sexo.»

Por esto, y obviamente por motivos de convicciones y consideraciones propias, me gustaría realizarles (hablo en plural porque no sé muy bien a quién me dirijo) una propuesta de enmienda al artículo sobre dicho término en el Diccionario de la Real Academia Española, en el que, hoy por hoy, el matrimonio homosexual (como les digo en el resto de mi mensaje, legal en España) no existe, ni siquiera considerado por la acepción de "Matrimonio homosexual" como especificativa (hecho que, igualmente, me parecería discriminatorio hacia todos aquellos matrimonios de cónyuges del mismo sexo).

Me atrevo a proponerles, desde mi ínfima influencia, como una estudiante universitaria más, en la RAE, esta modificación del Diccionario, simplemente porque considero que si la lengua evoluciona porque lo hace el pueblo, y con él la sociedad y la legislación, no debemos dejar fuera de la evolución lingüística "oficial" (por decirlo de alguna manera) parte de estos cambios sociales.

Sin más, acabo aquí mi propuesta.

Espero su respuesta para saber que llega a puerto, al menos, si bien no espero que se me haga mucho caso (aunque lo desee).

Un saludo y un abrazo,

María Pérez Sarmiento.

Bueno, pues ahí queda la misiva... Otra de esas cosas que denotan lo normal que soy.

PS: ahora que aún no han dado las 3 (son menos 5), voy a acabar el artículo/carta abierta de politiqueo, porque yo lo valgo.

1 comentario:

Marina Muñoz dijo...

Estás loca, pero molas. ¡Ole tú y tus ganas! Ojalá que aprueben tu propuesta.. Sí así lo hacen, avisa y si no, también.