De vuelta

Hace tiempo que tengo bastantes cosas rondando por mi cabeza. Supongo que un poco desde siempre, viene esto de comerme la cabeza. Sobre todo por las noches. Pero, claro, como quien dice, cuando una crece, sus problemas también. No es que tenga problemas, sino que me como la cabeza con cosas más... Relevantes, es la palabra; en mi vida.

Antes podía quitarme el sueño ir de excursión a Banyeres sólo porque sabía la conversación tan interesante que me esperaba en el bus, o el jugar un partido contra un equipo de categoría (de los que fichan a jugadores de otros clubs, aunque no te paguen un duro), o los nervios en Nochebuena por ver los regalos. Ahora son temas más serios.

Supongo que he estado tanto tiempo dándole vueltas a la cabeza que he empezado a encerrarme otra vez en mí, cosa que me prometí no volver a hacer, y menos ahora, que cuento con apoyos con que nunca he contado (no me malinterpretéis; siempre he tenido apoyos, pero ahora son de otro tipo. Y no, no me drogo. Jajajajaja).

Empecé a escribir el blog porque, nos guste o nos fastidie, somos seres efímeros (yo soy de las primeras; me gusta saberme fugaz, breve, pasajera, dentro de la perdurabilidad, si la palabra existe, del Universo). Y aparte de ser seres efímeros, somos seres reflexivos (no todos los humanos, aunque sí todas las personas). El problema de las reflexiones es que, se hagan en voz alta o de forma interna, son perecederas si nadie las plasma en ningún sitio. Bien sea la puerta de un baño público, un muro en una calle, una hoja de un libro, la memoria de otra persona, o, por poner otro ejemplo, un blog. Como éste.

Así, la finalidad de este blog, que no la tiene, podríamos definirla como... Mis ganas de perdurar. No sé bien durante cuánto tiempo, ni por qué, ni para quién. Talvez quiero que haya algo de esta etapa de mi vida presente para cuando la quiera recordar en otras; talvez espero ser célebre algún día y que la gente vea cómo es un genio antes de ser genio, o en su latencia (sigo siendo poco ególatra, como podéis comprobar).

Es por eso que me da tanta rabia que en períodos de alto nivel de reflexión me dé a mí por encerrar esos seres efímeros que son mis pensamientos en mi olla exprés, quiero decir... En mi cabeza. Así que os anuncio mi vuelta, tras este descanso, a la blogosfera.

"Bienvueltos" todos. :)

1 comentario:

Anónimo dijo...

YA ERA HORA! estabamos a dos velas!