Hasta los ovarios.

Hoy, como decía en el post anterior, no puedo más. Lo juro por mi vida: hoy no puedo más.

No es que no pueda más de darme por vencida, de derrumbarme y no poder erguirme de nuevo. No es eso. Es que no puedo más con el mundo, ni con la gente, ni con mi suerte, ni con la hipocresía que rige la sociedad, ni con nada. Hoy estoy harta de todo.

Estoy harta de compromisos familiares impuestos, sin más, desde que naces. Harta de tener que "cumplir" con los amigos. Harta de defraudarme a mí misma. Me doy rabia muchos días por exigirme tanto; pero no me puedo conformar, ni quiero, con ser "normal". Estoy harta de no esperar nada de nadie, para no llevarme chascos, y de que haya tanta gente esperando cosas de mí.

Me tienen hasta las narices los medios de comunicación, preocupándose tantísimo de dar importancia y cabida en sus horarios a la igualdad entre sexos, etnias, edades, etc., a la solidaridad y al apoyo a los que lo necesitan cuando no son capaces les sale de los santos cojones dar un mísero euro de sus beneficios para ayudar (talvez uno sí, y mil también... pero las televisiones, mismamente, pueden aportar mucho, MUCHO, más). Hasta las narices, también, me tienen los altos dirigentes de las cadenas de televisión, y de los medios mayoritarios, que convierten los informativos y todo aquello de alguna relevancia social en nuestras vidas en un mero panfleto de uno u otro partido político.

Estoy hasta las narices de la política únicamente regida por la economía y el interés. Me mata cada día un poco la pérdida de valores de la sociedad. Me da verdadera pena que el voto, en el país en que resido, sea considerado una obligación y no un derecho por el vulgo, cuando hace menos de 100 años la gente se mataba, señores, se MATABA, por votar, por poder decidir aquello que iba a influir sobre su vida... Aunque por todos sea sabido el hecho corrupto en la política española a lo largo de la historia. Me da asco, eso sí, la puta ley de Hondt que rige nuestro sistema electoral y hace que el bipartidismo quede sí o sí instaurado en nuestro país, y las minorías queden relegadas al voto de castigo a uno de los partidos mayoritarios si quieren que su voto sea útil (no voy a votar a Los Verdes o IU en mi comunidad para que mi voto vaya al PP, me niego en redondo).

Estoy harta de dirigentes, por todo el mundo, sin capacidad de mando. Harta de incompetentes que se suceden unos a otros y que se intercambian entre ellos (porque no os creáis que no se hablan entre ellos) el control de determinados factores de nuestra vida. Me da una mezcla entre asco y miedo pensar que Rajoy, con su privaticación de la educación, la sanidad y la mayoría de servicios sociales, pueda llegar a Presidente del Gobierno, sinceramente.

Me repatea, no sabéis cuánto, ver a un hombre, nimio como todos, que domina medio mundo por el hecho de ser el cabeza de una organización lucrativa como lo es el Papa de la Iglesia católica. Me repatea que se gasten 2 millones 400 mil euros en una puta visita de un día a una ciudad. Yo he pasado 2 días, en el mismo centro de Barcelona, y con todo me gasté 120 euros, valiendo el tren 60.  Me toca las narices la puta hipocresía vaticana, pregonando el amor a los otros, la comprensión, la misericordia divina, el poner la otra mejilla y el ser generosos con el prójimo, para luego no cumplir ninguno de sus pregones, amparándose en el pobre argumento de que "sólo Dios (su dios, que se escribe con mayúscula) tiene una capacidad infinita de comprensión, generosidad y misericordia"; vamos, que como no me sale de los cojones, me acojo a un argumento sin pies ni cabeza para justificar que soy un homófobo, un xenófobo, un avaricioso y un cabrón.

Me toca las narices mi mala suerte, si es que realmente existe... No había otra semana para que pasara lo que ha pasado, no. Tenía que ser esta que venía mi niña a verme.

Me pone enferma la hipocresía, y yo misma soy una hipócrita, gastando mi dinero (el de mi madre) en estudiar, en vivir cómoda, en comer bien, en poder salir si me apetece... Mientras en Haití, una chica que conozco, está viviendo un verdadero infierno y siente como cada día se acerca su hora más y más rápido... Me pone enferma de verdad.

Estoy harta de los Ministros de Sanidad de todo el mundo, y de representantes de grandes grupos químico-farmacéuticos, y de sus quejas sobre epidemias "incontrolables", cuando seguimos viendo la sanidad pública como algo más que una necesidad, que es realmente lo que es. No es justo, ni lógico, que desarrollemos ciencia y medios para combatir enfermedades, por el bien y la evolución de LA HUMANIDAD, y que seamos UNOS POCOS los que lo disfrutamos.

Estoy harta del mundo. Lo estoy. Y de las hostias que la vida te da así sin que le importe mucho. Y de la gente. Y de madrugar. Y de fregar los platos y tender la ropa cuando hace frío. Lo estoy.

Estoy hasta los ovarios de todo, hoy. Supongo que siempre, pero normalmente lo sobrellevo bien. Supongo, también, que esto mañana se me habrá pasado...

3 comentarios:

- dijo...

Son cosas para estar hartos de ellas, pero más importante es estar bien, intenta que no te afecte. Y además, te queremos. :D

- dijo...

P.D: No esperamos nada de ti, ya sabemos que todo va a ser genial. Jujuju.

Marina Muñoz dijo...

Estoy con Púrret (: